No sé qué pensar de las personas que presumen
no arrepentirse de nada en la vida, me pregunto si realmente lo dicen
honestamente o una vez mas es la costumbre de querer encajar en una generalidad
consistente y divina. Ahora resulta que nadie la ha cagado y que si cometió un error
ninguno es digno de desprecio a ser olvidado o borrado de la faz de la tierra,
de los impunes recuerdos que taladran la vasija de los recuerdos.
Es momento de recordar y comprender, el aceptar
de lo que si me arrepiento, en este proceso. Hoy Sali de casa después de un
COVID 19 que llego para emprender una nueva fase del camino, todos conocemos el
camino, todos queremos ir a el camino, pero pocos llegan a experimentarlo. ¿De qué
sirve querer algo si no tienes la capacidad de hacerlo? El ímpetu no es suficiente
cuando se trata de llevar tus sueños a el plano de la realidad. A lo largo de
mi vida coincidí con varios estafadores de energía (tan inofensivos como tener
una horda de amigos drogadictos permanentemente en casa) se dedican a jugar con
tus sentimientos y tus mas profundos deseos, le imprimen miedo a tus fantasías
haciéndote creer que eres tan adicto a ellos como a el LSD. Supongo que un buen
negocio futuro va a consistir en grupos de apoyo a la adicción de la ayuda y la
dependencia a la misma. En este camino solo encuentras una o dos personas que
realmente tienen la capacidad de ayudar y sobre todo la actitud.
Trato de no distraer las líneas en pretextos
absurdos, que solo resultan en quejas que justifican los infortunios sociales y
el ridículo potente que extermina el paso seguro de lo que tenia que ser una
vida llena de aciertos y cero arrepentimientos.
Creo que era agosto del 93, había pasado un
tórrido verano lleno de visitas, fiestas y momentos en Paris, era momento de
tomar un respiro, pero como siempre cuando estas acompañado ese respiro solo es
una añoranza que jamás llega, siempre hay algo, siempre existe una razón para
no detenerme. Muchas veces he culpado a los demás de esto, pero cuando me
duermo a las 3am, y me levanto a las 7.30 am me doy cuenta que es mi espíritu
el que no quiere detenerse. Al ver un atardecer con nubes en el firmamento un
destello de luz que tiñe de rojos y morados el cielo, siento el deseo de no
morir, de dejar de agonizar sin enterarme de lo que sucede afuera. La vida esta
en otra parte decía el Maestro Kundera, como no lo pensaría así, si él vivió la
pandemia social de una guerra en Praga.
Ese verano y su final llevo consigo a una
manada de amigos, todo era divertido, sobre todo al iniciar el día después de
las 3 de la tarde. Todo empezó en una comida en 6 Rue Coquilliere, comimos con 7
Johnnie Walker con agua mineral así los tomaba entonces… Esa noche seguimos
hacia el hotel de las visitas pero entendí con asombro que no era parte del
plan próximo, entonces tomamos un taxi hacia 188 Rue de Rivoli donde entre y
encontré muchos amigos que había citado en el lugar, son esos momentos en que
los astros coinciden en forma de personas, haciendo constelaciones enteras en
el momento exacto.
Bueno las visitas se transformaron en relaciones
y las relaciones ya habían llegado al lugar, en la confusión todo era fiesta, a
uno de mis amigos se le apareció una pareja local la cual lo abordo y se
convirtieron en amantes con espectador, esa pareja usaba todo tipo de drogas,
les encantaba la música electrónica y sobre todo los excesos. Las visitas nos
daban más wiski para beber, ¿tal vez de allí y no de mis antepasados viene el
gusto por la marca?, no es cierto, todos sabemos que el Johonnie es un orgullo
familiar. El lugar estaba lleno y los excesos sufrían un cambio de piel. Es
irónico que mi papa me hubiera mandado al infierno de Dante para no pensar mas
en el pecado, siempre lo he considerado mi ángel de la guarda mas potente. Era
una época donde el punto de no retorno estaba por cruzar… Creo que fue esa
noche la que consolido mi primer encierro. La noche tomo su rumbo, colisionando
con mis intereses mas profundos y mundanos, la necesidad que tiene el cuerpo y el
placer, gracias a Dios no hubo falla alguna, espere lo peor y sucedió lo mejor,
las visitas nos dieron el placer, mi amigo se fue con su pareja de amante con espectador.
No se en qué momento preferí dejar de caminar
para permanecer tumbado todo el día en el departamento, tumbados consumiendo lo
que había disponible. La pareja nos visito con nuestro amigo y ellos tenían más
y más pretextos para no salir.
La doble moral de lo debido y lo indebido, de
lo profundamente importante en el ámbito social y personal, el no dejar que los
dogmas impresos de manera natural dentro de tu testa olviden el camino, la
traición a uno mismo, desde la mesura opuesta del naufrago que desconoce tierra
firme al dejar de tener fe. En mi hogar existieron muchos excesos y
elocuencias, distorsiones que cobraron sentido en la vida futura. Mi padre era
un Poseidón que emitía sonidos dentro del inmenso mar, yo no puedo quejarme de
nada a su lado, aun y cuando mil veces desee que el no estuviera aquí, supongo
que todos los hijos del mundo alguna o algunas veces deseamos que nuestros
padres dejaran de estar a nuestro lado… Por enojo, por amargura, por resentimiento,
¿yo que se?. Los cánones impresos son tan importantes ya que no impiden la
evolución de tus exuberancias y virtudes, la vida social esta plagado de los
mismos, no siempre de manera sólida pero como en toda sociedad un ejemplo del
efecto Pavlov en nuestras mentes metódicas y repetitivas, amantes de la copia,
de pertenecer a pesar de no entender nada. Siento que la mas hermosa semilla de
las virtudes fue implantada en mi ser, el perpetuo aprecio y cuidado a mi
familia. Tengo un hermano que desde muy chico me explico la diferencia abismal
que existe entre la familia y un familiar. Creo que todos lo entendemos y la
evolución no perdona que yo sea familia de mis padres, causal de la combinación
de micro células y sus respectivos órganos reproductores, pero no así yo de
ellos cuando yo decido formar un hogar con mi esposa y el producto de los
intercambios de fluidos que emanan de la parte media del cuerpo. Al final mi
familia pasa a ser mi esposa y mis hijos, así sucesivamente la naturaleza
cambia el precepto del grupo adyacente para así transmitir normas de conducta (¡buenas
o malas, es lo que hay!) valores (¡esto es lo que entendí!) amor, desamor,
miedos, honor (aunque nadie sepa lo que esa palabra signifique, es la tempestad
cambiante de los tiempos). ¿De qué sirve tener el supuesto valor de ser
honrado?, presumirlo, tomarlo como estandarte si en el primer momento vas a
traicionar a tu familia… Mi papá, quien para muchos era un personaje
controversial (¡gracias a Dios!) inculco la costumbre de las navidades en casa.
Eso es una gran virtud para sostener en tiempos de identidad confundida, donde
los nuevos matrimonios pretenden estar lidereados por sus padres, permitiendo
que todo el contaminante pasado invada los miedos y costumbres de la nueva
familia, haciendo un experimento de lo que a ellos les fallo. Entonces mi padre
me indujo el habito de ser padre, no una simulación. Quien no entiende esta
diferencia no importa si es honrado, bien humorado, leal, fiel, prudente… Si en
un momento de crisis un familiar decide experimentar con el futuro prolifero de
la nueva familia el individuo que no comprenda en una base firme la diferencia
de elección entre familia y familiares automáticamente va a corromper todos los
supuestos valores aparentemente impresos por apócrifos padres que imaginariamente
buscaban hacer de ti un aparente galardón de los valores que ellos no tienen.
Entonces los padres muchas veces se rigen por los cánones sociales de la
coincidencia y la aceptación, para pasar desapercibidos y si muy aprobados bajo
el estigma del empate mundano e ignorante, dejando de reconocer la verdadera
esencia de la familia que es hacer hijos que no se rindan frente a la
adversidad, hijos que se reconozcan como legítimos padres y esposos sin sentir
pena de aquellos que no lo son y presumen una familia perfecta cuando en sus
entrañas tienen todo menos lo que presumen con tanto fervor. No importa que tan
honorable seas, si en el primer momento en el que la vida te acorrale, vas a
demostrar lo contrario a tus mas profundos valores y costumbres.