domingo, 12 de agosto de 2012

Cuerpos Estables e Inestables.

Considero que el principio del pensamiento interno radica en el estado de seguridad en el que se encuentre el ser, simplemente el grado de confianza personal que persiste a lo largo de el tiempo.
 
 
En nuestros tiempos, en otros tiempos, la naturaleza proporciona en su hábitat la seguridad propicia y temporal, como al sauce de 150 años fuerte y robusto, inmenso conector con el universo, inalcanzable, insustituible, imperturbable por aquellos vientos y lluvias tenues e inseguras. Lloviznas que se disipan ante el aire. De repente en aquel entorno sucede que la lluvia y el viento retoman su severa seguridad olvidada o guardada y el fuerte árbol tendrá que entender que ya no formara parte del predio que le asigno la vida, arrancado ferozmente por el sentir del diluvio y la tromba.

Dudo que exista una eternidad insegura, no entiendo porque la seguridad no perdura, percibo que es parte del equilibrio que fecunda el claro oscuro de la vida, retomando y valorando cada detalle, cada instante. Imposibilitando la soberbia que nos llevaría a una vida vacía, sin anhelos, sin metas, sin nada.

Esta vez no leí sobre el tema, esta vez tan solo expreso lo que pienso y lo que siento, pues quiero encontrar el camino de mi propia realidad, quiero descifrar mi propia limitante de miedo a ser mi propio camino, mi propio karma.

Inseguridad por no tener, por no ser, por no sentir. Inseguridad materializada por una vida carente de introspección. La inseguridad que nos otorga el no perder la rienda segura del futuro, la inseguridad que deja creer en un futuro asegurado, el haber creído que ya no tenia por que preocuparme.

En lo personal y supongo que de manera estúpida y frívola, algunos humanoides creemos que la seguridad a veces significa cuanto y por cuanto tiempo puedes mantener la economía a la medida de tus necesidades, pero hoy entiendo que no es solo eso, si no mas bien la seguridad forma parte de un sentimiento que solo se encuentra estable cuando te pertenece todo, cuando todo sale bien, cuando todo esta de manera equilibrada.

La respuesta necesaria no es el acapararlo todo en exceso, si no más bien el entender el mantener un status mental, social y económico sobre el absoluto poder de la seguridad interina. El equilibrio radica en comprender por que suceden las cosas, como suceden y como poder restituir cualquier cambio inoportuno pero real del proceso diario. Como entender y de que manera influyen estos cambios en nuestro actual estado de ánimo, como detener un pensamiento negativo que por constancia perpetua incontrolable se convierte en manera de pensar. Como sustituir una suceso negativo en materia de aprendizaje para no involucrar por resultado a la seguridad futura.

Aprovechando la seguridad pasada podemos mantenernos en un eterno recordar de influencia para la seguridad presente y futura, por la simple y sencilla razón de que todos tenemos una realidad diferente y de que todos sumamos y restamos en nuestras vidas, los sucesos positivos y negativos que nos trae la inevitable realidad.

Mantenerse en un estado de ánimo positivo forja en nosotros una manera diferente al enfrentar los problemas, previendo de fuerza, razón, esperanza y fe el guerrero a lo largo del camino.